jueves, 27 de enero de 2011
miércoles, 26 de enero de 2011
Black Russian
Cuando estéis Solari, meté en un vaso old fashion mucho hielo, dos partes de vodka y una de licor de café. Luego a disfrutar en calma de un gran disco.
La mordida no es
grave como ladrar
cuando es fácil cazar
te cara de animal
te quiero tanto
que me hace daño
y si algo pasa
que nos separe
serás hermosa
un black russian podrá
hacerme prometer
cosas que no podré
aunque quiera cumplir.
Yo siempre supe
como es el juego
lucha en el barro
con tus amigas.
Tu mirada ve los misterios prohibidos
contempla en las sombras con piedad
me hace muchas veces invisible
y toma mi mano
y me obliga a reir.
Te quiero tanto
tu belleza llegó
dulcemente hasta mi
terminaba el amor
a carcajadas
los rumores al fin
y así eran ciertos.
Muertos de risa
perdiendo el tiempo
después un día
todo fue inútil
si pudiera jugar
para siempre con vos
convertir el amor
tu pelo suave
jugaría con mi fe
te quiero tanto
que me hace daño
Y si algo pasa
serás hermosa.
Tu mirada ve los misterios prohibidos
contempla en las sombras con piedad.
Me hace muchas veces invisible
y toma mi mano
y me obliga a reir.
La mordida no es
grave como ladrar
cuando es fácil cazar
te cara de animal
te quiero tanto
que me hace daño
y si algo pasa
que nos separe
serás hermosa
un black russian podrá
hacerme prometer
cosas que no podré
aunque quiera cumplir.
Yo siempre supe
como es el juego
lucha en el barro
con tus amigas.
Tu mirada ve los misterios prohibidos
contempla en las sombras con piedad
me hace muchas veces invisible
y toma mi mano
y me obliga a reir.
Te quiero tanto
tu belleza llegó
dulcemente hasta mi
terminaba el amor
a carcajadas
los rumores al fin
y así eran ciertos.
Muertos de risa
perdiendo el tiempo
después un día
todo fue inútil
si pudiera jugar
para siempre con vos
convertir el amor
tu pelo suave
jugaría con mi fe
te quiero tanto
que me hace daño
Y si algo pasa
serás hermosa.
Tu mirada ve los misterios prohibidos
contempla en las sombras con piedad.
Me hace muchas veces invisible
y toma mi mano
y me obliga a reir.
jueves, 20 de enero de 2011
Preguntitas Sobre Dios - Atahualpa Yupanqui
Un día yo pregunté:
¿Abuelo, dónde esta Dios?
Mi abuelo se puso triste,
y nada me respondió.
...Mi abuelo murió en los campos,
sin rezo ni confesión.
Y lo enterraron los indios
flauta de caña y tambor.
Al tiempo yo pregunté:
¿Padre, qué sabes de Dios?
Mi padre se puso serio
y nada me respondió.
Mi padre murió en la mina
sin doctor ni protección.
¡Color de sangre minera
tiene el oro del patrón!
Mi hermano vive en los montes
y no conoce una flor.
Sudor, malaria y serpientes,
es la vida del leñador.
Y que naide le pregunte
si sabe dónde esta Dios:
Por su casa no ha pasado
tan importante señor.
Yo canto por los caminos,
y cuando estoy en prisión,
oigo las voces del pueblo
que canta mejor que yo.
Hay un asunto en la tierra
más importante que Dios
y es que naide escupa sangre
pa’ que otro viva mejor.
¿Qué Dios vela por los pobres?
Tal vez sí, y tal vez no.
Pero es seguro que almuerza
en la mesa del patrón.
lunes, 17 de enero de 2011
De dónde salió esta mina??
De donde salió esta mina ?
salió de acá de Argentina
para despertar la inquina
de los necios de este mundo
salió del país profundo,
salió del sur y del norte
con inteligencia y porte
pa`que tiemblen los gallinas
De donde salió esta mina ?
salió de los cosecheros,
los que explotan, los negreros
de la Argentina vacuna
gorilas desde su cuna
viciosos, brutos, paquetes
no toleran el doblete
que hizo Néstor y Cristina
De donde salió esta mina ?
salió de Arturo Jauretche
del pan, el café con leche
del tango, del firulete
de Marechal con bonete
pa`que sufra noche y día
la atorranta oligarquía
que fundió nuestra Argentina
De donde salió esta mina ?
salió de los calabozos
donde cortados a trozos
con su picana caliente
mutilaban a la gente
estos cobardes, soretes
y hoy tiemblan ante un piquete
que se arma en alguna esquina
De donde salió esta mina ?
salió de pañuelos blancos
armados ante el espanto
de tanta sangre caída
de tantas madres sufridas
por encontrar a sus hijos
los jueves, sus días fijos
hoy, todavía caminan
De donde salió esta mina ?
salió del alma de Eva
de aquella que puso a prueba
a poderosos de turno,
les hizo cambiar el rumbo
de una Argentina sufrida
así, la clase oprimida
entró en la senda divina
De donde salió esta mina ?
que te asustan sus vestidos
envidiás, sos resentido
aunque no andás con lo puesto
lo que no pagás de impuestos
aunque a la Patria le cueste
llevás a Punta del Este
y criticás la Argentina !
De dónde salió esta mina ?
salió de la Facultad
vos, que hiciste la mitad
de alguna de las privadas
aunque papá te pagaba
tu cabeza no dió frutos
y hoy sos uno de los brutos
que solo produce orina
De dónde salió esta mina ?
de Forja, de Carta Abierta
de los que abrieron la puerta
para que el país se incluya
los que no hicieron la suya,
los Rosas, los Artiguistas
nosotros, los Peronistas
y la lista no termina
De donde salio esta mina ?
también salio de Dorrego,
de Moreno, de Azurduy
de Malvinas a Jujuy
de Corrientes a Mendoza
ella es Chaco y Peñaloza,
es hija de San Martín,
es la flor del jardín
ustedes son las espinas
De dónde salió esta mina ?
a vos, poeta barato
quiero contarte en un rato
el linaje de su origen
ella es del pueblo aborigen
del guaraní, del amancay
vos, que lees a Bucay
y te crees Alfonsina
De dónde salió esta mina ?
no debería preocuparte
yo te aconsejo esmerarte
por saber a dónde va
pues recién va en la mitad
de éste, su primer mandato
y te aviso, hay para rato
de PRESIDENTA CRISTINA !!!
AUTOR: Eduardo Galantini, militante correntino, medico ex vice gobernador y legislador nacional.
lunes, 10 de enero de 2011
De María Elena Walsh a Eva. Desde aquí, un pequeño homenaje para ellas.
I
Calle Florida, túnel de flores podridas.
Y el pobrerío se quedó sin madre
llorando entre faroles sin crespones.
Llorando en cueros, para siempre, solos.
Sombríos machos de corbata negra
sufrían rencorosos por decreto
y el órgano por Radio del Estado
hizo durar a Dios un mes o dos.
Buenos Aires de niebla y de silencio.
El Barrio Norte tras las celosías
encargaba a París rayos de sol.
La cola interminable para verla
y los que maldecían por si acaso
no vayan esos cabecitas negras
a bienaventurar a una cualquiera.
Flores podridas para Cleopatra.
Y los grasitas con el corazón rajado,
rajado en serio. Huérfanos. Silencio.
Calles de invierno donde nadie pregona
El Líder, Democracia, La Razón.
Y Antonio Tormo calla "amémonos".
Un vendaval de luto obligatorio.
Escarapelas con coágulos negros.
El siglo nunca vio muerte más muerte.
Pobrecitos rubíes, esmeraldas,
visones ofrendados por el pueblo,
sandalias de oro, sedas virreinales,
vacías, arrumbadas en la noche.
Y el odio entre paréntesis, rumiando
venganza en sótanos y con picana.
Y el amor y el dolor que eran de veras
gimiendo en el cordón de la vereda.
Lágrimas enjuagadas con harapos,
Madrecita de los Desamparados.
Silencio, que hasta el tango se murió.
Orden de arriba y lágrimas de abajo.
En plena juventud. No somos nada.
No somos nada más que un gran castigo.
Se pintó la República de negro
mientras te maquillaban y enlodaban.
En los altares populares, santa.
Hiena de hielo para los gorilas
pero eso sí, solísima en la muerte.
Y el pueblo que lloraba para siempre
sin prever tu atroz peregrinaje.
Con mis ojos la vi, no me vendieron
esta leyenda, ni me la robaron.
Días de julio del 52
¿Qué importa dónde estaba yo?
II
No descanses en paz, alza los brazos,
no para el día del renunciamiento
sino para juntarte a las mujeres
con tu bandera redentora
lavada en pólvora, resucitando.
No sé quién fuiste, pero te jugaste.
Torciste el Riachuelo a Plaza de Mayo,
metiste a las mujeres en la historia
de prepo, arrebatando los micrófonos,
repartiendo venganzas y limosnas.
Bruta como un diamante en un chiquero
¿Quién va a tirarte la última piedra?
Quizás un día nos juntemos
para invocar tu insólito coraje.
Todas, las contreras, las idólatras,
las madres incesantes, las rameras,
las que te amaron, las que te maldijeron,
las que obedientes tiran hijos
a la basura de la guerra, todas
las que ahora en el mundo fraternizan
sublevándose contra la aniquilación.
Cuando los buitres te dejen tranquila
y huyas de las estampas y el ultraje
empezaremos a saber quién fuiste.
Con látigo y sumisa, pasiva y compasiva,
única reina que tuvimos, loca
que arrebató el poder a los soldados.
Cuando juntas las reas y las monjas
y las violadas en los teleteatros
y las que callan pero no consienten
arrebatemos la liberación
para no naufragar en espejitos
ni bañarnos para los ejecutivos.
Cuando hagamos escándalo y justicia
el tiempo habrá pasado en limpio
tu prepotencia y tu martirio, hermana.
Tener agallas, como vos tuviste,
fanática, leal, desenfrenada
en el candor de la beneficencia
pero la única que se dio el lujo
de coronarse por los sumergidos.
Agallas para hacer de nuevo el mundo.
Tener agallas para gritar basta
aunque nos amordacen con cañones.
María Elena Walsh
fuente
Calle Florida, túnel de flores podridas.
Y el pobrerío se quedó sin madre
llorando entre faroles sin crespones.
Llorando en cueros, para siempre, solos.
Sombríos machos de corbata negra
sufrían rencorosos por decreto
y el órgano por Radio del Estado
hizo durar a Dios un mes o dos.
Buenos Aires de niebla y de silencio.
El Barrio Norte tras las celosías
encargaba a París rayos de sol.
La cola interminable para verla
y los que maldecían por si acaso
no vayan esos cabecitas negras
a bienaventurar a una cualquiera.
Flores podridas para Cleopatra.
Y los grasitas con el corazón rajado,
rajado en serio. Huérfanos. Silencio.
Calles de invierno donde nadie pregona
El Líder, Democracia, La Razón.
Y Antonio Tormo calla "amémonos".
Un vendaval de luto obligatorio.
Escarapelas con coágulos negros.
El siglo nunca vio muerte más muerte.
Pobrecitos rubíes, esmeraldas,
visones ofrendados por el pueblo,
sandalias de oro, sedas virreinales,
vacías, arrumbadas en la noche.
Y el odio entre paréntesis, rumiando
venganza en sótanos y con picana.
Y el amor y el dolor que eran de veras
gimiendo en el cordón de la vereda.
Lágrimas enjuagadas con harapos,
Madrecita de los Desamparados.
Silencio, que hasta el tango se murió.
Orden de arriba y lágrimas de abajo.
En plena juventud. No somos nada.
No somos nada más que un gran castigo.
Se pintó la República de negro
mientras te maquillaban y enlodaban.
En los altares populares, santa.
Hiena de hielo para los gorilas
pero eso sí, solísima en la muerte.
Y el pueblo que lloraba para siempre
sin prever tu atroz peregrinaje.
Con mis ojos la vi, no me vendieron
esta leyenda, ni me la robaron.
Días de julio del 52
¿Qué importa dónde estaba yo?
II
No descanses en paz, alza los brazos,
no para el día del renunciamiento
sino para juntarte a las mujeres
con tu bandera redentora
lavada en pólvora, resucitando.
No sé quién fuiste, pero te jugaste.
Torciste el Riachuelo a Plaza de Mayo,
metiste a las mujeres en la historia
de prepo, arrebatando los micrófonos,
repartiendo venganzas y limosnas.
Bruta como un diamante en un chiquero
¿Quién va a tirarte la última piedra?
Quizás un día nos juntemos
para invocar tu insólito coraje.
Todas, las contreras, las idólatras,
las madres incesantes, las rameras,
las que te amaron, las que te maldijeron,
las que obedientes tiran hijos
a la basura de la guerra, todas
las que ahora en el mundo fraternizan
sublevándose contra la aniquilación.
Cuando los buitres te dejen tranquila
y huyas de las estampas y el ultraje
empezaremos a saber quién fuiste.
Con látigo y sumisa, pasiva y compasiva,
única reina que tuvimos, loca
que arrebató el poder a los soldados.
Cuando juntas las reas y las monjas
y las violadas en los teleteatros
y las que callan pero no consienten
arrebatemos la liberación
para no naufragar en espejitos
ni bañarnos para los ejecutivos.
Cuando hagamos escándalo y justicia
el tiempo habrá pasado en limpio
tu prepotencia y tu martirio, hermana.
Tener agallas, como vos tuviste,
fanática, leal, desenfrenada
en el candor de la beneficencia
pero la única que se dio el lujo
de coronarse por los sumergidos.
Agallas para hacer de nuevo el mundo.
Tener agallas para gritar basta
aunque nos amordacen con cañones.
María Elena Walsh
fuente
viernes, 7 de enero de 2011
martes, 4 de enero de 2011
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