viernes, 18 de julio de 2008

Max Weber y "La política como vocación". Tomá nota, Cleto

Un político sin convicciones es, sencillamente un oportunista, un profesional de la manipulación y un vendedor de humo.

Un político sin conciencia de su responsabilidad, perdido en su mundo neurótico de utopías irrealizables, conduce a la derrota segura.